done lo que no use

pozo

Para la cada vez más complicada “vida en sociedad”, resulta fundamental que los individuos respeten ciertos valores que contribuyen a la convivencia. Así como las complejidades de la sociedad actual se edificaron lentamente, desde el pie, la falta de pilares pueden derrumbar de un plumazo, el intrincado mundo moderno. Ningún castillo se sustenta en el aire.

No soy el más indicado para hablar de responsabilidad, sin embargo, alguien ha de hablar de uno de los pilares de la sociedad, en vías de demolición.

Quien fuera educado de forma tal que desde tempranas horas está entrenado en el ejercicio de actos responsables, posiblemente obtenga satisfacción por el deber cumplido. Si la satisfacción es genuina, no suele trascender la frontera que separa lo íntimo y personal de la bulla y el engrupimiento. En esos casos, la satisfacción queda dentro del humilde recinto privado.

Ser responsable genera esfuerzos, pues la responsabilidad implica una obligación de cumplir un compromiso adquirido, o el cuidado de hacer o decidir algo. La responsabilidad es, para no pocos, una carga difícil de sobrellevar. Estos preferirán tomar un atajo para no cumplir con lo prometido. Son los que suelen aparecer en la tele, haciendo auto-bombo.

Si ser responsable genera esfuerzos, el no serlo genera consecuencias fuleras: falta de confianza. Nuestra confianza y lealtad la depositamos únicamente en aquellos que de manera estable cumplen con lo que han prometido. A su vez, la falta de confianza genera descreímiento del sistema democrático en que vivimos, pues si no se cree en los hombres, no se creerá tampoco en las Instituciones.

A juzgar por como se comportan los irresponsables, se podría asegurar de que lejos de aceptar las respectivas culpas que les corresponden, optan por el viejo truco de la mosqueta, o peor aún, por subvertir el orden. Así fue como en la peor crísis que recuerda este país, lo cual es decir ya que hemos vivido de crisis en crisis, nadie asumió las consecuencias de sus erróneas acciones y decisiones. Cuando no la pateaban para lo de Carlota, la pateaban para lo del vecino. Los irresponsables han demostrado vocacion por el obol. Y además, vocación por la mentira fácil.

Como la mejor forma de educar, es dar ejemplo, y el ejemplo a emular es jodido, jodido hemos quedado los uruguayos. La irresponsabilidad se ha puesto de moda. Nadie asume sus compromisos, mucho menos culpas. Incluso da hasta la impresión de que nos creemos vivos. La sociedad ahora, fabrica irresponsables. En estas condiciones, será difícil salir del pozo, pues sale quien es consciente del lugar que ocupa y obra en consecuencia, responsablemente. Por lo visto, continuaremos en el pozo, socavando cimientos, demoliendo.

más jarabe

3ra. dosis. (ecologica).

El Origen del Puma

El millonario empresarial, Thomas Fireheart, es mejor conocido
como el asesino a sueldo... Puma. El fue contratado por
La Rosa para matar al Hombre Araña. Cuando Kingpin, el rey
del crimen, se enteró de esto, le ordenó a La Rosa que cancelara
el contrato. Kingpin quería utilizar al Hombre Araña, por lo que
deseaba mantener al escalador de paredes vivo por algún tiempo.
La Rosa deshizo el trato y el Hombre Araña pudo arrojar sus
telarañas otro día más.

Doom del Futuro

Llevando puesta la anticuada armadura del gobernante de
Latveria, el Doctor Doom, un extraño recién llegado del
año 2099, sufrió una terrible derrota ante Tyger Wild,
después de haber retado su reglamento. Una vez conciente,
el enigmático personaje reclamó la manta del monarca del
siglo XX, proclamando "el Doctor Doom ha muerto, que
viva Doom". Ahora armado con la tecnología avanzada del
siglo XXI, Doom es mucho más peligroso que nunca.

el grito

Entre 1893 y 1895, Munch pintó cuatro versiones de El Grito: La obra forma parte de una serie llamada "El friso de la vida", que Munch calificó como "un poema de vida, amor y muerte". El personaje central, con expresión de tormento y desesperación, grita ante un paisaje distorsionado por la tensión. Simboliza, al igual que la obra de Kafka, la angustia del hombre moderno, su soledad, el drama de su existencia, la fragilidad del ser humano ante el horror.

Según relata Munch en su diario, «estaba caminando con dos amigos. Entonces se puso el sol. De momento todo el cielo era rojo sangre, y me sobrecogió una gran melancolía. Me quedé quieto y me recosté al borde del camino, me sentía muy cansado, nubes como sangre y lenguas de fuego caían sobre la ciudad y sobre los fiordos azules y negros. Mis amigos continuaron caminando y yo me quedé solo, temblando de ansiedad. Sentí como si un gran grito interminable atravesara la naturaleza».

Sobre ese día tan especial, el New York Times informaba : «Poco después de las cinco de la tarde hacia el oeste, el horizonte se cubrió de un rojo escarlata brillante y hasta las nubes se tiñeron de rojo. Las personas en la calle estaban asombradas y se reunían en grupos en todas las esquinas de la ciudad mirando hacia el oeste. Muchos creyeron que había un gran fuego».

El peculiar fenómeno se debió a una gran erupción del volcán Krakatoa. Un grito, pero de la tierra. La cantidad de ceniza arrojada a la atmósfera fue tal que se desparramó por todo el planeta, tardando años en terminar de aterrizar.

Uno de éstos cuatro gritos, era exhibido en el Museo Munch de Oslo. Allí entraron dos personas, a modo de visitantes y sin más se lo robaron. Ahora ha de estar a buen resguardo, en alguna caja fuerte. Así de fácil, los poderosos se roban nuestro derecho a expresar nuestro miedo. Así de fácil se roban nuestros gritos de espanto ante el terror que nos imponen.

cuco malo

Es cierto, explicarnos como funciona la cabeza de un terrorista se nos hace una tarea imposible. Cualquier explicación que se nos quiera dar, nos resultará de otro mundo. Estamos tan alejados de la mentalidad del terrorista como de la realidad en que vive.

También estamos alejados de la mentalidad de los poderosos. De las injusticias que cometen, de sus arbitrariedades, de su absoluta falta de sentido común y sensibilidad que exhiben en cada uno de sus brutales actos criminales. Sin embargo, ya sea por acostumbramiento, pereza o estupidez, nos hemos ido tragando la barbarie de los que oprimen, el abuso de los que deciden. En cambio, a la otra barbarie, a la de los terroristas, no.

Los poderosos cuentan con el silencio complice de la manada tanto para pergeniar sus incalificables actos de salvajismo (en sentido despectivo) como con el natural rechazo a los que reaccionan de forma violenta generando terror. Y siguen adelante, sin medir las consecuencias. Siempre adelante. Arrasando.

La maquinaria está servida de forma tal que los engranajes que no encastren, se eliminen. La voz de los que se quejan, ha de ser callada. Los brazos de los que se alzan en armas, han de ser amputados. Sus vidas, cercenadas. La manada debe ser obediente y permitir que los poderosos sean cada vez más poderosos. Y si alguien se retoba y se le da por secuestrar espectadores de un teatro, o niños de una escuela, a la mierda ese alguien, los espectadores, los niños, el teatro y la escuela.

Después, a agitar el cuco. El cuco es malo.

20 es más que 10

Cualquier ruso debe de conocer lo suficiente a Putin como para saber que si un comando de terroristas toma de rehen a niños en una escuela, antes de que cuenten tres los niños serán boleta. Los padres de niños rusos han de temer más a Putin y sus fuerzas de seguridad que a los terroristas chechenos, supongo o quiero suponer. De hecho, pasados ya unos días de la matanza, sigo sin saber quien mató a los niños. Es que ni me he preocupado en averiguarlo. ¿ Para qué ? La versión oficial dirá, o habrá dicho de inmediato que fueron los terroristas. Obvio.

Haya sido quien haya sido, ha sido de una crueldad difícil de superar. Matar niños es matar inocentes y es matar el futuro. Hasta sería fácil decir al respecto que nada justifica semejante acto. Otra obviedad. Lo cierto es que existe un territorio ocupado por los rusos : Chechenia. Y que los chechenos llevan, que yo sepa, más de una centuria luchando por su independencia. Lucharon contra zares, bolcheviques y democratas rusos. Y les ha ido sistematicamente mal. Tan mal, que se evita dar detalles. Apenas nos llegan rumores. Nada fiables, por cierto. Rumores que dan cuenta de extremada crueldad rusa.

Y los rusos podrían seguir ocupando Chechenia, con o sin crueldad, alguna centuria más, sin que nadie se ocupe de lo injusto que resulte y lo que es peor, sin que nadie siquiera se entere. Si nos hemos enterado de que los rusos ocuparon Chechenia es porque hay chechenos terroristas. De haber únicamente chechenos mansos, los rusos tendrían asegurado el pic-nic.

Cualquiera que se precie de tener dos dedos de frente, y haya sufrido un atentado como el que sufrieron los rusos en esta escuela, recapacitaría en lo desventajoso que resulta que por ocupar un territorio, le maten a un hijo. Pero no es tan sencillo. Hoy día, tener dos dedos de frente, escasea. Lejos de devolver lo que no les corresponde, los rusos ofrecieron 10 lucas verdes a quien proporcione datos acerca del paradero de terroristas. Los chechenos, para no ser menos, ofrecieron 20 a quien mate a Putin.

Confieso que ganas no me faltan. Y no precisamente por la guita.

Da la impresión que tendremos conflicto para varias centuras.

me sigo jarabeando

2da Dosis. (democrática)

El Origen de El Capitán América.

Durante la Segunda Guerra Mundial, el patriota
Steve Rogers se ofreció para probar un suero que lo
convertiría en un super soldado.
Tras beber el suero, su cuerpo se volvió perfecto.
A pesar de que el inventor del suero murió a manos
de un espía nazi, triunfó dandole a la democracia
un gran defensor. El capitán Améica.

Composición química de la biava :

M& C 1995 Marvel Entertainment Group, Inc. All rights
reserved. Pepsi M.R. Cards Marvel Comics.
Bah, figuritas que se canjean por chapitas.

En cualquier momento me jarabeo con otra figu, como
forma de mitigar el efecto Bush-Putin-Sharon.

me estoy jarabeando

1ra. dosis.

Aparece Elecktra.

Cuando Matt Murdock, el ciego, conoció a Elecktra, fue víctima de un "amor a primera vista". Pero después del asesinato del padre de ella, era obvio que no podrían tener una vida feliz. Tiempo después Murdock se convirtió en Daredvil, el hombre que no le teme a nada. Pero poco sabía que Elecktra se convertiría en una asesina y en su enemiga mortal.

Caida de Gracia

El virus "de la cara", una substancia cambiante de la realidad perdida en los túneles de los metros de Nueva York en los años sesenta, volvió a la superficie creando una raza loca como: Daredvil, Shield, Hidra, el Snakerrot, Morbius, el Vampiro Viviente y Hellpawn. Esta raza le costó a Daredvil su identidad secreta, pero le trajo el amor de su vida, Elecktra.

último recurso

La violencia es el último recurso de los infelices. Desde esa óptica debería enfocarse el problema del terrorismo. Existen terroristas porque existen infelices violentos. Eliminar las causas de infelicidad, implicaría como resultado inmediato, eliminar la violencia. Pero no. Se prefiere imponer, aplastar, ningunear. Se opta entonces por la soberbia y el desdén para perpetuar el orden establecido tan conveniente a los felices detentores del poder. Se opta por ignorar el reclamo de los infelices. Por avasallar. Por no negociar.

El hombre negocia desde la noche de los tiempos. Tanto así que el negocio ha de estar instalado ya en nuestros genes. El capitalismo hizo del negocio, su negocio. La vida es un continuo negocio. Una transa. Un toma y daca. Desde la primer bocanada de aire, hasta la última exhalación, casi no se hace otra cosa que dar y recibir, pedir y procurar. Sin embargo, con los terroristas no se negocia.

Si los terroristas utilizaran métodos pacíficos de reclamo, a la manera de Ghandi, resultarían claramente más simpáticos, pero obviamente serían aniquilados con mayor facilidad. Más que terroristas, serían ingenuos. El poder no perdona, ni pierde la oportunidad. Es implacable. La felicidad de los poderosos radica en usurpar y eliminar la resistencia que la usurpación genera. A su vez, toda usurpación provoca en el usurpado, infelicidad y necesidad de reparo. El usurpado que reclama se expone.

El terrorismo aumenta porque aumenta la infelicidad. Las sofisticadas técnicas anti-terroristas, no lo detienen. Los discursos que se hacen en sentido contrario, son basura. Nada detiene a quien está dispuesto a morir por una causa. Nada detiene a quien tiene comprado el cielo. La lucha contra el terror, es una lucha perdida.

La lucha política entre un todo-poderoso que no entiende de límites, y un débil que pretende no ser arrasado, está lejos de ser la lucha entre el bien y el mal. Es una lucha desigual en la que el débil no tiene nada para perder. Su debilidad es su fortaleza, la desesperación y el odio su motor y el terror su única estrategia.

Para quien vive una vida muelle, de su casa a la oficina, para quien ve la vida a través de la tele, va al cine, comenta el fobal, para quien su mayor hazaña es colarse en el bondi y su mayor riesgo corrido es una cana al aire, o para quien su meta es ir a Miami o veranear en Can-Cun, el terror lo espanta. Su cabeza no entiende razones que expliquen los actos terroristas. Su cabeza es más propensa a tomar por razonable la doctrina anti-terror, la doctrina de no negociar, pues el terror espanta.

El terrorismo de Estado es anterior al terrorismo que combaten los Estados. Y si los métodos empleados por los teroristas, son crueles o demenciales, mas crueles y demenciales son los empleados por los Estados para combatirlos.

El hipócrita orden establecido, tarde o temprano será destruído. Ya vendrán otros hipócritas a ocupar este lugar.

desatino

Como mundo hay uno sólo, y hoy más que nunca antes "uno sólo" significa uno sólo, estar apartado es estar fuera. El mundo que todo lo puede, impone. De vacío se repleta. Vacío de virtudes, dignidades, ideas. Vacío de pasiones. Vacío de justicia. Lo eterno se vuelve fugaz, lo sublime, efímero. Lo trivial se hace moda. Superfluo e intrascendente corre veloz el mundo, desmandado hacia la nada.

Si bien mundo hay uno sólo, todos conocemos, unos más que otros, la existencia de mundos apartes. En el mundo de mundos que es este mundo, el de las bitácoras es tan intangible como el más intangible de los mundos posibles y tan apartado como el que más. No por intangible, espiritual. No por apartado, dramático. No por no trillado, diferente.

Tan apartado del mundo como lo permiten las bitácoras, tan por fuera como se pueda estar de este mundo imprudentemente estúpido, intentaré llevar la crónica de un desatino controlado: mi mundo. Un mundo a contrapelo del mundo que todo se lo traga. Un mundo minúsculo e insignificante que ha quedado relegado en un rincón, donde no estorba.